Tras 500 lunas, te hallo, X...

Siempre adorado y infinitamente amado X;

El amor es la mayor inspiración para el escritor...

TU eres y fuiste mi musa en todas mis existencias. El amor de mi vida. Mi Dios aquí en la tierra. Nada, comparable a tus manos ni nada igual al manso tono de tus ojos.
Tu, X: toda mi alegría, toda la saciedad de mis sentidos y ansías. Todo mi júbilo es sentir brotar la vida de tus creaciones, escritos y aliento y cuanto aportas a este mundo. Mi existencia te aguarda para llenar todos sus caminos con tus palabras que son las mías para siempre. Espejo, te nombro. Espejo de mis días y de mis noches. En ti me sostengo, desde ti me renuevo. Me devuelves a mis ojos con tu reflejo.
Tus ojos, espadas sin dolor dentro de mi carne, luz en mis sombras.
Todo tú en el espacio lleno de cánticos angélicos. Tú,X, en la sombra y en la luz. Tú, X, eres la clave secreta de mis minutos. Tú,X, la contraseña. Tú, X, eres todas las combinaciones de números. La vida. Renacer. Ser yo misma.
Mi deseo es entender los espacios, el universo y las formas. Tú lo llenas todo y yo te recibo. Tu existencia recorre el espacio y llega a mis células que son astros por ti iluminados, ¡por ti, mi luz, por ti!

Viviré dándote las gracias. Adorándote, admirándote.

Todos mis pensamientos van dirigidos a ti, mi eternamente querido, como también van a ti mis vivencias y cada una de mis ilusiones, ahora alegremente esparcidas, otras tristemente contenidas, esperando saber si el destino escuchará mi plegaria para hacer frente a la vida al no tenerte cerca. ¿Pero qué importa? Si estoy resuelta a ser errante, hasta que pueda volver a tus brazos y decirte que solo contigo está mi hogar. Porque tan solo en tus brazos, puedo dejar que mi alma flote hasta el reino de las almas bendecidas.
Ningún otro hombre, ningún otro ser podrá jamás poseer mi corazón, nunca, nunca, ¡Nunca!
Oh, continuaré amándote. Nunca juzgues mal a este, mi corazón por adorarte, que no hay más egoísmo en él que el de pensarte.
Pues tu presencia está allá, un poco más allá de ésta carta, entre la confusión de mis letras. Debo escribir brevemente, y tengo mucho que decir, ahora que sé que me lees. Mis pensamientos te abrazan, mi eternamente querido, mientras espero que el destino escuche mi plegaria, para ser fuerte y hacer frente a una vida entera en tu ausencia.

Condenada estoy a ser una extranjera en tus tierras, que vagabundea sin rumbo, esperando volar a tus brazos en otras vidas que fueron o vendrán. Otro hombre, otro ser, nunca, nunca jamás podría poseer mi corazón. Eso sencillamente no es posible.
Qué presente, qué nostalgia llena de lágrimas y suspiros por ti. Me llenas de dicha, en cualquier otro momento, cuando me hallo lejos de necesitarte. He estado enamorada de ti desde el primer instante de mi existencia. El autor de tu tiempo, te une al mío cada vez que leo tus ideas sobre el papel de alguna página. Entonces veo como la íntima respiración de tu corazón, me mantiene sujeta a tu esencia. Porque dime, ¿Quiénes somos tú y yo? ¿Quiénes fuimos, seremos o somos hoy?
Lo que de mí sé, es que soy espectro inexperto, un espíritu perturbado. ¡Oh, que torpe soy al sentirte de cerca! ¡Que despilfarradora llego a ser con los excelsos minutos que me otorgas desde tu estancia! Que quiero inmovilizarlos y me hago premiosa. Que quiero retenerlos, y se escapan veloces entre mis brazos que te ocuparon en otras vidas. ¡Oh Tú, que eres yo, y de quien son todos mis senderos! No hay nadie tan rica en amor como yo, cuando soy pródiga de amor verdadero.

Tú me ves aquí, el desventurado naufragio de mareas y tempestades en mi propio interior: pronto, muy pronto rogarás, que vuelva hacía mi misma este ardiente amor por el cual tantas veces busqué volver a ti.

El ejercicio de vivir, por si solo no borrará el recuerdo de tus besos de entonces. Aquellos besos increíbles, conmovedores e inolvidables que me han emocionado hasta lo más hondo y han despertado en mí una pasión cuya existencia desconocía por completo. .. Sentimientos que me has encendido lunas y lunas atrás…Anhelos que no me atrevo a analizar. Fue la primera vez, si, la primera vez que una alegría pura y sin límites llenó todo mi ser. ..Deseo, necesito desesperadamente olvidar tu exquisito tacto, tu sabor celestial, pero mi corazón se niega a cooperar. Hace tanto tiempo de eso…
Con un ansía que me desconcierta, sólo sueño con sentirte otra vez. Ahora que te he vuelto a encontrar, solo deseo hacerlo otra vez. Y otra. Y pagar el precio más elevado. En lugar de haber satisfecho mi curiosidad en el sentir, no has hecho más que avivar mi apetito. Un apetito que amenaza con consumirme, después de quemarme viva.

Pero si tu bondad tiene todavía un regalo guardado para mí, como circunstancia que vuelva, similar a la que, tú lo sabes, es ahora más querida para mí que la vida, (benditos recuerdos que me alimentan) bendecirías y santificarías mi vida una vez más, mis idas y vueltas, para bien; y podrían los lazos que me unen a la vida ser tan fuertes e indisolubles como las hebras de hilo de la vida de un ser inmortal!
Contigo y también sin ti, siempre tuya:
C.





Comentarios

Entradas populares